Del mar a su paladar, una de las expresiones más utilizadas en castellano para hacer notar que estamos consumiendo marisco o pescado fresco. Fresco significa algo así como recién hecho o recién acabado y para muchos es sinónimo de calidad y seguridad alimenticia, aunque a veces hay excepciones, pero para que un europeo o un estadounidense o un asiático o incluso un vecino latino, pueda consumir un producto fresco extraído o cosechado en Latinoamérica, tendría que haber un sistema de tele transportación para traerlo desde Ecuador o Argentina, que coma y luego regrese a su lugar… y hasta el momento no contamos con este tipo de transporte.
¿A dónde vamos con esta historia media fantástica? A situarnos en el desafío que tienen hoy los exportadores de camarón, el cual es en síntesis asegurar que un producto se perciba como fresco en lugares que están muy distantes, cuyos consumidores exigen una calidad y sabor como si estuvieran degustando los productos a pie de la finca o en la orilla de la playa.
Afortunadamente hay toda una actividad alrededor de este desafío, hablamos de toda una planeación en el cultivo, cosecha y manejo de la materia prima, luego en la planta congeladora diferentes métodos que permiten conservar las cualidades del producto fresco, después asegurar un transporte eficiente y posteriormente una correcta distribución dentro de los diferentes destinos, al final el propósito es que el consumidor se deleite con un producto de calidad.
Empresas como Budenheim y Granotec Ecuador y Argentina son partícipes en este proceso, aportando no sólo soporte técnico, sino también toda la gama de productos tecnológicos que ayudan a que las cualidades de frescura se mantengan durante semanas, meses, incluso años.
La sinergia entre estas dos empresas ha permitido que muchos exportadores de camarón y mariscos en general, puedan llevar, almacenar y asegurar calidad en todo lo que producen.
Hoy por hoy, se ha sumado un nuevo desafío; los mercados son cada vez más exigentes y entre esos requerimientos están los que tienen que ver con los ingredientes y las etiquetas, los consumidores cada vez más revisan los empaques buscando fechas de caducidad, contenido, ingredientes, etc. Muchos piden etiquetas blancas o verdes, que sean lo más cercano a lo natural, es decir, que aparte de asegurar un producto similar al fresco, tenemos ahora que los exportadores también deben buscar que sus ingredientes no sólo cumplan con las legislaciones de cada mercado, sino que además sean lo más cercano a lo natural.
De aquí entonces la importancia de la estrategia Budenheim-Granotec Ecuador y Argentina, ya que vamos a la par de estas nuevas tendencias y creamos productos tecnológicos de última generación que pueden incluirse en los empaques como 100% natural o Con ingredientes naturales o también como All natural ingredients. Esto es el resultado de años de investigación, años de pruebas de ensayo y error, los que al final nos han permitido llegar a este tipo de desarrollos y seguir a la vanguardia en el mercado mundial de pescados y mariscos. Nuestros socios comerciales pueden tener hoy día la confianza de que sus etiquetas serán aceptadas hasta en los mercados más exigentes, y la tranquilidad de que podrán seguir posicionando sus marcas de acuerdo a las nuevas tendencias en los consumidores de este tipo de alimentos. Estamos en pleno lanzamiento de este nuevo tipo de ingredientes naturales y contamos con todo el soporte técnico que se necesita para entender el concepto vanguardista de como fresco y natural.
Autor:
Claudio González Iturra, Ingeniero Pesquero
Gerente Técnico Centro y Sudamérica, Línea de pescados y Mariscos de Budenheim